El Gobierno nacional espera un domingo negro hoy en las elecciones provinciales de Corrientes donde La Libertad Avanza compite con candidato propio, sin aliados y con un escenario adverso. Especulan que podrían quedar cuartos en la contienda electoral que servirá de termómetro social después del escándalo de las coimas. Para colmo, será la última foto antes de las cruciales elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires, justo una semana después.

Corrientes va a las urnas para elegir el sucesor del gobernador Gustavo Valdés, 5 senadores y 15 diputados provinciales. Competirán siete fórmulas por la gobernación: Valdés impulsa la figura de su hermano Juan Pablo, acompañado en el frente oficialista Vamos Corrientes por Néstor Pedro Braillard Poccard, actual vicegobernador.

En la vereda de enfrente, el peronismo espera dar un batacazo y entrar al balotaje con la figura de Martín “Tincho” Ascúa, intendente de Paso de los Libres.

El candidato del PJ llega con el respaldo de la expresidenta Cristina Kirchner, quien formó parte de la presentación de la candidatura de Ascúa, en lo que fue su último acto partidario antes de la sentencia por la causa Vialidad.