Avanza la causa contra Alberto Fernández por violencia de género contra Fabiola Yañez y el fiscal Ramiro González ya trabaja en el pedido de elevación a juicio oral.

En abril, la Cámara Federal porteña confirmó el procesamiento del exmandatario por “lesiones leves agravadas por haber sido cometidas en un contexto de violencia de género”, “lesiones graves” y “amenazas coactivas” contra la exprimera dama, con quien mantenía una relación desde al menos 2016 hasta mediados de 2024.

Luego de un proceso que llevó un año, el fiscal pidió la opinión a las partes: Yañez presentó un escrito en el que planteó una pena de 12 años, además de rechazar cualquier compensación como probation.

El caso se encuentra en la etapa final. González cerró la investigación y ya tramita el pedido de elevación a juicio oral para presentarlo ante el juez Julián Ercolini, según precisó Clarín, quien recientemente le contestó a Alberto Fernández y le solicitó que deje de dilatar la instancia final y declare ante un tribunal.

La investigación determinó que hubo un “contexto de violencia de género signado por la particular relación asimétrica de poder entre Alberto Ángel Fernández y Fabiola Andrea Yañez, por lo menos desde el año 2016 hasta el 6 de agosto del 2024”.

Según el fallo que en abril confirmó el procesamiento de Fernández, el cual lleva la firma de los jueces Martín Irurzun y Eduardo Farah, la Cámara sostuvo que durante esos años existió un vínculo marcado por la “desigualdad de poder” y “violencia habitual y constante”, especialmente de tipo psicológica, pero también con episodios físicos recurrentes.

Además, se destacó que los ataques se produjeron en un entorno de aislamiento forzado dentro de la Quinta de Olivos, donde Fernández ejercía plena autoridad. “Hay fuertes motivos para sostener que los hechos concretos y objetivos que fueron preliminarmente acreditados en la causa, que incluyeron lesiones y otras formas de violencia de género practicadas por quien mantenía una marcada desigualdad de poder con ella, fueron la causa de un marcado deterioro en las condiciones de salud de la víctima”, señalaron los jueces.

Asimismo, remarcaron que la situación de vulnerabilidad de Yáñez era conocida por el imputado desde el inicio de la relación. “Todo demuestra que la damnificada estaba en una situación de desigualdad de poder, al interior y exterior de la pareja”, agregaron.