Señor director:
Quiero compartir con los lectores historias y anécdotas de la lonja ribereña en la Cuarta Región de Chile. Es que en esa zona hay una ruta caminera, agua y arcilla, ofrece alternativa para acortar distancias en la región de los valles chilenos. Una montaña separa a dos ríos milenarios. Tan grandes como una acequia crecida. Abunda la naturaleza pura, pedregales asoleados, fruta madura y crece el ganado menor por esos cerros.
La Provincia de Coquimbo (Chile), se caracteriza por sus "cortadas de camino”, puentes y saltos. Aunque la cosa ha cambiado por las restricciones del crecimiento en la agricultura, minería, turismo y otros avances, la andadura remata tal como lo hacía el diaguita de antaño. Y no es para menos, la región es lugar para esquivar cerros y cruzar los ríos Elqui, Limarí y Choapa, entre los más conocidos.
¿Quién no ha soñado alguna vez ver desde la cima al valle vecino? La mayoría de los ribereños de ambos lados, sueñan.