Señor director:
Un día como hoy, 24 de febrero, pero de 1946 un acto eleccionario consagró al General Juan Domingo Perón, como Presidente de la Nación. Ese día le dijo a la multitud que lo aclamaba: “Llego a vuestra presencia con la emoción que produce sentirme confundido entre este mar humano de convivencias honradas. De estas conciencias de criollos auténticos, que no se doblan frente a las adversidades”. Argentina empieza a cambiar la historia. La fórmula Perón – Quijano ganó con una diferencia de tan sólo 200 mil votos, a la fórmula Tamborini – Mosca, que reunió, en la Unión Democrática a (la Unión Cívica Radical (Comité Nacional), al Partido Socialista, al Partido Comunista y al Partido Demócrata Progresista, a los principales diarios, a la Sociedad Rural, a los capitales británicos y extranjeros y que tuviera la decidida intervención de la embajada de Estados Unidos, a través de su embajador Spruille Braden, quien fuera el verdadero ideólogo de esta unión. A tal punto que, la verdadera consigna del pueblo fue “Braden o Perón”.
El apoyo de la clase obrera fue determinante en ese proceso electoral, que polarizó al país ante el enfrentamiento de dos proyectos, uno de liberación nacional, conducido por Perón y otro de dependencia, representado en ese momento en la figura del embajador Braden.
Por : Fabián Alberto Núñez
Ex asesor Consejo Deliberante de Jáchal
Dr. Mario Alfredo Luna
Ex presidente Consejo Deliberante de Jáchal
