Señor director:

La armonía y el equilibrio emocional y espiritual son factores de gran importancia para amntener la salud. La paz interior, el equilibrio espiritual, la alegría del corazón, el reinado del amor en mi interior, conducen a buen funcionamiento del sistema nervioso, y por ello de las demás funciones: respiratoria, circulatoria y digestiva. La fe, la alegría, el perdón, el amor, la alegría por el bien ajeno, la tolerancia, el optimismo, nos conducirán a la felicidad y a la salud mental, y contribuirán en forma decisiva a mantener nuestra salud física.

Por ello es equivocado todo intento de curar a un enfermo atendiendo solamente a sus manifestaciones orgánicas, por el contrario debe tenerse en cuenta, además de esta sintomatología física, toda la situación psíquica y espiritual del paciente, es decir, tratar al paciente como una unidad bioespiritual indivisible. Es decir, no tratar el asma o la úlcera gastroduodenal, sino a tal paciente en su totalidad, que padece asma o úlceragastroduodenal.