El motivo de mi carta es para opinar sobre una nota publicada por DIARIO DE CUYO, titulada "Mejoran la reconstrucción facial por quemaduras con máscaras 3D". Este avance tecnológico es maravilloso, ya que ayuda a mejorar la calidad de vida de las personas que sufrieron quemaduras en el rostro, como también mejora la autoestima del paciente. La nota explica que los cirujanos saben que el rostro es una geografía complicada para trabajar en caso de quemaduras profundas. La convexidad de la nariz, la concavidad de las mejillas y de las órbitas oculares, sumado a que el paciente tiene que poder respirar, ver y alimentarse hacen que el vendaje -que puede hacerse en otras partes del cuerpo- no sea una opción. Con el objetivo de mejorar los métodos tradicionales, cirujanos plásticos del Hospital Italiano realizaron un procedimiento inédito en el que desarrollaron una máscara personalizada con escaneo e impresión 3D para facilitar la fijación del injerto y lograr una buena remodelación de las cicatrices. "Cuando uno se quema y se destruye toda la piel, hay que poner piel nueva. Esa piel nueva, si no está bien fija, no prende. Es por eso que "con un software que se usa para simular resultados en cirugía estética, escaneamos la cara del quemado. El escaneo logra una imagen tridimensional perfecta de la cara. Con una impresora 3D se imprime la máscara que calza perfectamente en el rostro, lo que permite asegurar el injerto en su lugar y que prenda en su totalidad", dice Horacio Mayer, subjefe del servicio de Cirugía Plástica del Hospital Italiano de Buenos Aires. El material utilizado es polímero 100% biodegradable, se puede esterilizar sin inconvenientes y es sumamente económico. Por tal motivo propongo que este tratamiento esté al alcance de todos los ciudadanos argentinos y que en lo posible sea accesible o bien gratuito para aquellas personas que no tengan recursos. Así también todos podemos tener acceso a la tecnología médica que ayuda a salvar vidas.



Por Melina Guevara
Alumna del Colegio Nuestra
Señora de la Consolación
Santa Rosa - 25 de Mayo



La máscara se imprimió en polímero 100% biodegradable derivado del ácido láctico.