Señor director:

El paso del tiempo puede ser un motivo. Vehículos de carga pesada, otro más. Y, así, podemos seguir hablando de hipótesis. Lo cierto es que la avenida Hipólito Yrigoyen, desde avenida Rawson hasta la Plaza de Santa Lucía, es decir unas 10 cuadras, el asfalto se ha deformado en ambas manos de circulación.
Es como si la capa asfáltica hubiera sufrido una petrificación que la dejó con formas de olas. Muchos conductores transitan con frecuencia por la zona.

Sin dudas que tienen suficiente pericia como para saber que hay que mantener firme el volante y no perder el control del vehículo. Pero hace unos días, una familia de San Luis que venía en auto, sufrió un accidente debido a estas deformaciones de la calzada. Como resultado, el vehículo se fue contra el cordón de la vereda y rompió el tren delantero.

Este conductor no hizo ninguna denuncia. Sin embargo, el viaje de paseo que hizo a San Juan, se transformó en un mal rato, debido a que tuvo que gastar el dinero que traía en el arreglo del automóvil, para poder regresar a su provincia.
La conclusión fue que un turista no pudo recorrer o viajar hacia algunos lugares atractivos de San Juan para disfrutar de unos días de vacaciones.

Resulta necesario que las autoridades correspondientes solucionen el problema de calles y avenidas de la provincia que están en mal estado. Esto es para transitar de manera segura.