Leo el tan “vapuleado” Clarín. Veo un “recapacitar peronista”. Claro, el Poder Judicial comienza a salir de su “letargo” ocasionado por dos razones: 1) estructurales ancestrales. Haberse creído con “coronita” y hoy la sociedad no cree en la “reyecía”. Los más responsables de este “poder” intentan cambiar esa “mole” ya oxidada, anquilosada, que necesita un cambio para que comience a funcionar, acorde a los tiempos, con rapidez y eficiencia. No la lentitud que convierte a la Justicia en “injusticia”, pues cuando llegan las medidas, tarde, son tristes con resultados inapropiados. Y 2) letargo: por la “dosis” inyectada desde el mismo Poder Ejecutivo (contrariando la independencia de los poderes), quien intervenía para “cajonear” expedientes y sentencias, de sus “protegidos políticos”. Tanto se está “descubriendo”, que ya no pueden quedar “pegados” a dirigentes tan deshonestos.
Ahora llegó la hora de los “iluminados”. Esos que darán un nuevo “aire” al peronismo. Bienvenido sean, si dirigen a esa enorme corriente, a veces “usada”, engañada con un populismo contraproducente, hacia un camino de concordia, responsabilidad, que es el trabajo y no la dádiva.
La búsqueda de la Justicia, por medio de la paz, no enfrentamientos dañinos, y colaborar para lograr la Unidad Argentina. Unidad no es acatamiento servil. Es el discenso, pero con diálogo y acuerdos consensuados.
Dios permita ver “la grieta” superada. Hombres capaces, dispuestos a dirigir con vocación de servicio, no beneficios personales. Sí para demostrar que hoy pueden existir héroes que aman a la patria, como en nuestro pasado, los que se sacrificaron por ella. Pasarán a la historia como los héroes de nuestro Siglo.
