Señor director:
El coronavirus se expandió a nivel mundial. Desnudó aciertos y desaciertos gubernamentales. Dejó en cada uno de los habitantes, la clara visión de la globalización. Los dirigentes políticos del mundo deben cumplir un rol muy importante en este presente. Dejar de lado nacionalismos, incentivar en sus medios, dentro de todos los órdenes, (investigadores, universitarios, industriales, entre otros sectores), la conciencia de la cooperación internacional, para lograr conocimientos y visión amplia, como nueva estrategia a enfrentar situaciones y problemas. Manejar una "logística" nueva, donde se afronten temas como el medio ambiente. Economías regionales, comunicaciones, salud, defensa, legislaciones compartidas, acciones consensuadas, etc. Todo este nuevo enfoque debe realizarse con una coherencia máxima, dejando de lado beneficios individuales. Sí, beneficios y obligaciones compartidas. No se debe tirar por la borda la experiencia vivida, la enseñanza dejada. Esta debe marcar el nuevo camino en organizaciones y acciones nuevas, que costarán, pero buscando las excelencias, serán capaces de enfrentar el nuevo desafío. Acuerdos internacionales que cambien la faz del mundo actual, donde la unión y cooperación sea la razón del actuar.
