Señor director:

Los árboles para los sanjuaninos son parte de la supervivencia en una tierra casi desértica. Es por eso que cuando los vemos talados, en primer lugar nos llama la atención, luego preguntamos por qué y luego nos indignamos.

Pero, ¿qué hacer, a quién recurrir? Es que la defensa del arbolado público es una bandera que levantamos todos o al menos, la mayoría de los nacidos en esta tierra.

Es cierto que hay árboles enfermos y secos que hay que erradicar. Pero luego de su erradicación hay que colocar nuevos ejemplares. Expreso todo esto porque al transitar por un sector de calle "Las Moras", en el departamento Zonda, veo que hay varios eucaliptus que están talados de una manera particular.

A estos ejemplares que me refiero les han dejado los troncos altos. Pareciera que la intención no era erradicarlos, sino eliminar las copas de estos árboles. Esto es, sin dudas, un ultraje a la naturaleza y un atentado para todos los sanjuaninos.

Digo esto, porque se supone que por cada árbol en mal estado que se erradica, hay que reemplazarlo por otro. Sin embargo, aquí sólo se mutilaron. A simple vista no se ve la intención de quitar sus troncos de ahí y menos aún de colocar árboles nuevos.

Es de esperar que las autoridades correspondientes, ya sea de la provincia y/o municipales, investiguen y deslinden responsabilidades sobre esta tala que también significa una deforestación de una zona muy bella de la provincia.