Señor director:


La salud corporal abarca la salud física, psíquica y espiritual. Se logra mediante el respeto de las leyes naturales que rigen la vida humana, que son las de respirar aire puro, comer alimentos naturales, vivir en contacto con el sol, el agua y el aire. Tener pensamientos alegres y optimistas; no caer en vicios y bajas pasiones, y sobre todo cumplir con el mandamiento de Jesús, de amar a Dios sobre todas las cosas y amarnos unos a otros.


En este sentido, sobre el valor del amor para la salud, dice el doctor Leonard Leskow: "El amor puede proporcionar consuelo o curar, independientemente de la naturaleza de la enfermedad, ya sea emocional, mental espiritual o física". Por su parte, dice Stephen Parsons: "En sí mismo, el amor es un curador potente, cualquiera sea el contexto en que aparezca". Siguiendo todo esto, gozaremos de la naturaleza humana en sus aspectos físicos, intelectual y espiritual, es decir, la salud integral.