Señor director:

¿Quién no oyó hablar de los "muñecos de Desgens"? Los veíamos en todos los eventos como desfiles, corsos, cumpleaños, actos oficiales y escolares... Con sus enormes cuerpos, siempre hacían reír y entretener a los niños en quienes despertaban mucha alegría y felicidad. Fueron sus manos las que moldearon los rostros de Mickey, Pluto, Donald, Minnie y muchos más.

Hoy, San Juan despide a un artista, un soñador. Falleció el pasado 30 de marzo.
Cuántos sábados compartió la radio con nosotros. Era puntual en el programa "San Juan por mi sangre''. A don Oreste Desgens nunca le faltaba tema para deleitar al público. Hablaba de los carnavales sanjuaninos de antaño, de las típicas chayas sanjuaninas. Contaba que había integrado una orquesta y que tocaba la batería. ¡Era un niño grande! También se destacaba en su trabajo.

Siempre me habló de sus mapas y mostraba uno grande de San Juan, donde él había participado en su proyección, porque había trabajado en Catastro.
Las calles de Trinidad lo extrañan. Te veíamos pasar en el auto rojo o en tu amada bicicleta, visitando amigos para hablar de los grandes proyectos que siempre tenía para San Juan. Cada gobierno que cambiaba le abría nuevas esperanzas. Pero no había tiempo para escuchar a un soñador.

Hoy, después de su partida, nos queda un agradable recuerdo y el privilegio de haber sido amigo de un grande, un soñador sanjuanino, que se fue al cielo a regalar sonrisas y muñecos a los ángeles.

¡Gracias don Desgens!