Señor director: 


Antes se carecía de medios para saber sobre el niño nonato. Ahora, la técnica abrió "una ventana al vientre materno" (la fibra óptica, el ultrasonido, los electrocardiogramas, los electroencefalogramas, etc,). Ya no vale eso de "pobrecita la mamá, que aborte". ¿Y el niño? Lo que hay que hacer es ayudar a la mamá. No me parece extraño que el Senado en Estados Unidos haya prohibido los abortos a partir de las 20 semanas de gestación ("Acta de Protección de Bebés No Nacidos con Capacidad de Dolor"). Pero ya en el primer trimestre, el sistema nervioso inmaduro del niño lo capacita para un dolor extremo, que no pueda expresar. La Dra. Robin Pierucci, neonatóloga, basada en su experiencia, afirma: "Los bebés no nacidos viables sienten dolor". Los bebés prematuros reaccionan a procedimientos dolorosos de maneras obvias, gesticulan sus caras, patean con sus pies, contraen sus manos en pequeños puños, doblan sus dedos del pie, arquean sus espaldas y tratan de alejarse retorciéndose o simulan besar a la persona ofensiva". "Ya sea que lleguen a término o sean extremadamente inmaduros, aunque no puedan emitir palabras, los bebés en cada unidad neo natal de cuidados intensivos claramente no reaccionan bien ante los procedimientos a lo que los adultos saben que son procedimientos dolorosos". ( su artículo: "Los Bebés Sienten Dolor en el Útero. Yo Los He Visto"). Casi todos nos sentimos mal ante noticias de niños maltratados; pero no así ante el maltrato del aborto.


¿Esquizofrenia social? Susan Armacost, directora Legislativa del Wisconsin Right to Life, explicó que "el movimiento abortista ha tratado de convencer al público que el sufrimiento físico de los bebés nonatos durante el aborto es un mito".