
Esta nota se la debía a Francisco "Maleta" Gómez, empresario y vecino de la Esquina Colorada. Hombre emprendedor, "hecho de abajo", sin más auxilio que su voluntad, su inteligencia, su familia (especialmente Juana, su señora), sus empleados, su idoneidad, y a su don de gente. Esto hace que se gane la confianza de sus clientes, a los cuales fideliza de una manera que consigue que siempre vuelvan. Cuenta que arrancó como aprendiz de colchonero y tapicero en 1960, con 16 años. En ese entonces vivía en Coll y Sarmiento y después en la Villa San Miguel. "El 21 de septiembre de 1962 fui a ver a mi padrino, que resultó ser mi padre biológico, don Valentín Beretta. Vivía en Las Casuarinas, donde tenía una bodega, junto a su socio, Don Bartolomé Del Bono. Le pedí que me prestara su chalet de la calle San Miguel, que estaba abandonado desde el terremoto del 44. Al día siguiente vino y me dio las llaves y puse el taller en la parte norte". El chalet a que se refiere, era muy característico en mi barrio. Enorme, con verjas negras, estilo inglés y rodeado de árboles. Sigue su narración Gómez. "Me puse de novio con Juana Bumjeil, que le llamaban "Turca", cuando trabajaba en la farmacia Trincado. En 1963 nos casamos y me vine a vivir aquí. Trabajó esforzadamente a mi par. Los comienzos fueron difíciles. Me vi obligado a trabajar un tiempo en la bodega Graffigna, donde me pusieron "Maleta” por un delantal de cuero que me hizo mi señora. Entonces debí trabajar en mi taller al medio día y a la noche. Tuvimos dos hijas, de las cuales Alicia se quedó a trabajar en el taller y hoy es la que lleva adelante la empresa". Le pido a Gómez que me cuente su vinculación con el deporte, en la subcomisión de ciclismo del club Del Bono. "El gordo Stalles, el "Pinda” Quiroga y el "Chango” Cárdenas, me vinieron a ver para rearmar la subcomisión, que había quedado acéfala y desafiliada de la Asociación Sanjuanina de Ciclismo. Me pusieron de presidente y colaboraron mucho Jorge Fernández, como secretario, el "Gordo" Correa, como tesorero y los amigos Stalles, el "Pinda”, Cardenas, el "pollo” Jofré, Nelson Díaz, Astorga, el "Pocho” Esbry y otros. Con el tiempo llegue a ser presidente de la Asociación, cuando decidimos convertirla en Federación y fui su presidente, pero siempre ligado al club Del Bono. Levantamos el prestigio de la Doble Calingasta, y después del éxito de la primera carrera que organizamos, don Francisco Montes nos dio una mano grande cuando DIARIO DE CUYO puso los premios”. Su madre fue doña Santos Gómez. "Era jachallera y mi infancia transcurrió en Huaco. Mi madre falleció muy joven, con 31 años, de quien fui hijo natural, como se decía entonces. Al morir mi padre biológico, mis hermanos por parte de padre nos cedieron el chalet, que luego compré a mis hermanos maternos y quedé con la propiedad”. Para finalizar, agrego a este relato, necesariamente breve pero intenso, que Gómez forma parte de nuestro grupo de amigos de la Esquina Colorada y estamos muy orgullosos de él, porque testifica la vigencia de la inclinación por el trabajo, habitual en nuestro barrio, donde combatíamos la adversidad con la sola ayuda del esfuerzo propio y las ganas de progresar y ser alguien en la vida.
Por Orlando Navarro
Periodista
