Soy una simple ciudadana azorada por los bombardeos a Siria, sumado a las atrocidades de Africa, los refugiados sin destino... Me pregunto, ¿qué ocurre con los dirigentes políticos que no pueden detener los males presentes? ¿Cómo pueden existir algunos de ellos que son los autores de los mismos?


Sumado a la incógnita, ¿¡cuál será la verdad!? pues está manipulada la información, que ni siquiera, con todos los adelantos técnicos, podemos conocer la razón de los sucesos.

Imagen de bombardeo a Damasco, capital de Siria.

La humanidad padeció el horror de dos guerras mundiales. Vivimos la mentira de armas nucleares cuando destruyeron a Irak. Nos conmovimos con la marea de refugiados que día a día se desplazan por distintas regiones del planeta en busca de protección.


Sabemos de los intereses por mantener puntos estratégicos de la tierra para lograr poder. El poder, la ambición por lo material es lo único que prima en nuestro presente. ¿Y dónde está la humanidad? No seguramente en la directrices del presidente de Rusia, Vladimir Putín, incentivando a la juventud a lograr el poderío de su país o con un Donald Trump bombardeando y levantando muros proteccionistas.


No en una sociedad que se aboca a ver programas entretenidos, para no analizar la realidad que circunda, en vez de enseñar a sus hijos a prepararse para ser hombres y mujeres de bien.


El caos presente viene desde los hogares. No existe el esfuerzo y la responsabilidad. Los valores tergiversados. Lo que interesa es sólo lo material.


Si no enseñamos la solidaridad sumado a valores y responsabilidad, son éstas las consecuencias a nivel local, nacional e internacional.


Ustedes, señores políticos, que en el país sólo se dedican a socavar, con el único propósito de tomar el poder, son también los causantes de los males.


Padres, educadores, políticos y ciudadanos todos, pongamos el hombro, no en destruir, sino en colaborar desde el rol que nos toque. A encontrar el camino donde exista la responsabilidad, la honestidad, esfuerzo y valores morales. Breguemos por una humanidad más solidaria y esforzada para el bien de nuestro presente y de las generaciones venideras.