Frutas y verduras siempre es una opción sana para alimentarse.

La salud de los niños es prioridad principal para los padres. En especial si están en edad de crecimiento. Ese es la importancia de una buena nutrición. En ese contexto se encuentra un sector de alimentos denominados "mineralizantes''. Se trata de aquellos que contienen sales minerales en una gran proporción. Sales que a la vez sean asimilables. Son elementos indispensables para la buena nutrición y el crecimiento de los chicos. Pero, para ser asimilables, deben ser minerales naturales. Las que están químicamente aisladas no se fijan en los tejidos, sino que son eliminadas como se ingieren. Durante el desarrollo, el niño tiene la necesidad imperiosa de ingerir alimentos que contengan sales minerales, especialmente las de calcio, hierro, fósforo, magnesio, sodio y potasio. La falta de sales minerales da origen a múltiples enfermedades, entre ellas el raquitismo, caries en los dientes, reblandecimiento y deformación de los huesos, tuberculosis y anemia. 


Las sales minerales se encuentran en gran proporción en todos los alimentos del reino vegetal, especialmente frutas y hortalizas frescas como el brócoli y la coliflor, cereales, o bien en los derivados animales, tales como la leche, yemas de huevo, como además en las aguas. 


Para que el organismo pueda beneficiarse con las sales minerales, es necesario que los alimentos sean consumidos en estado crudo o cocinados al vapor o en su propio jugo. Si se cuecen los alimentos en mucha agua, que luego es desechada, se pierden casi por completo las sales, pues pasan al agua de cocción.



Por Dr Francisco Lázzaro
Médico - MP 1760