Señor director:
Habiendo tomado conocimiento que la Corte de Justicia local, a partir del pasado día 27 de junio de 2017, incrementó los valores, tanto de las "Unidades Tributarias" creadas por la Ley 3908 Código Tributario Provincial, en uso de las facultades otorgadas por el art. 10 de la Ley 401-I, a los fines, entre otros, de hacer frente a los gastos que demanda la prestación del "servicio de Justicia" en nuestra provincia. Acordada 51/17 -, como los del "diligenciamiento de las cédulas de notificaciones y mandamientos judiciales", según sentencia dictada autos Nº 79090, "Oficina de Notificaciones S/ Peticiona (ref. nuevas tarifas en diligenciamiento de notificaciones)" y publicada en el Boletín Oficial del pasado 23 de junio de 2017. Como abogado matriculado en el Foro de Abogados de San Juan Nº 698, con más de 43 años de ejercicio continuo de la profesión, me siento en la obligación y necesidad de convocar a mis "colegas litigantes", a que nos unamos en una seria, profunda y sentida plegaria, para que Dios ilumine, tanto a los magistrados que integran la Corte como a los funcionarios que integran el sector administrativo de la Corte, para que con los incrementos dispuestos, más los recursos que integran el Presupuesto Anual, volvamos a contar en nuestra provincia con un "Servicio de Justicia digno y eficaz", dirigido y con alcance a la generalidad de la población sanjuanina en igualdad de condiciones, Artículos 22, 24 y 33 C Pcial – donde: 1.- No se tenga que tomar las audiencias, en los procesos laborales, a las personas discapacitadas, en la vereda o en las confiterías aledañas al edificio donde funcionan dichos Tribunales, Laprida Nº 28 (O) Altos, por carecer el mismo de las instalaciones necesarias para que puedan acceder a las oficinas de los Juzgados, que funcionan en el 1ro y 2do. Piso.
2.- Todos los inmuebles donde funcionan dependencias del Poder Judicial Provincial cumplan con los recaudos previstos por la Ley 24557, Ley de Riesgos de Trabajo, sin necesidad de tener que "esperar" a que la Aseguradora de Riesgos del Trabajo lo denuncie, como lo denunciara públicamente el abogado Vera, secretario Administrativo de la Corte, por cuantom tanto el conocimiento como el cumplimiento de la Ley, en este caso la Ley de Riegos del Trabajo, es uno de los presupuesto necesario para integrar la Corte.
3.- Las instalaciones de todos los edificios donde funcionan las dependencias que integran la estructura orgánica del Poder Judicial, cumplan con la reglamentación edilicia, prevista y exigida para zonas de riesgo sísmico.
4.- Las Notificaciones y/o Mandamientos con domicilio dentro del "radio del Juzgado", cuyo límite es la avenida de Circunvalación, sean diligenciadas en forma gratuita, como lo fue hasta el Acuerdo 15/2000 de la Corte con su integración anterior.
5.- Los abogados litigantes, en particular y el público en general, no tengamos que andar "peregrinando" por las calles de la ciudad, en razón de la desordenada y dispersa ubicación de las dependencias que integran la estructura orgánica del Poder Judicial.
6.- Los abogados litigantes, en particular y el público en general, no tengamos que "codearnos" con los presos que, día a día "pasean" por los pasillos y las escaleras del Edificio Central de calle Rivadavia, con el riesgo que ello importa.
7.- Tengamos las providencias simples, las sentencias interlocutorias y definitivas en los plazos fijados en la norma del inc. 3) del art. 33 del CPC/Ley 988-O; del inc. b) del art. 22 del CPL/Ley 337-O y en los arts. 196 y 238 del CPP/Ley 754-O.
8.- La expedición de informes y/o la tramitación de peticiones no judiciales, dado el alto costo de los mismos, sea atendida sin aplicación del plazo fijado en el art. 361 del CPC/Ley 988-O para las "entidades públicas", ajenas al Poder Judicial.
9.- Volvamos a sentir el inmenso orgullo que significa no sólo ser abogado y ejercer esta hermosa profesión, sino el sentirnos "gustosos y conformes", tanto del "servicio de Justicia" que se nos brinda, como del "lugar" donde debemos concurrir a diario en defensa de los derechos e intereses de nuestros mandantes.