Señor director:

El 15 de enero de 1944, hace 79 años, un terremoto de 7,4 puntos en la escala de Richter dejó a la ciudad de San Juan en ruinas. El sismo fue violentísimo y se sintió fuerte en Córdoba, La Rioja, Mendoza y San Luis. La ciudad se derrumbó porque, en gran parte, sus construcciones eran de adobe. Nada ni nadie estaba preparado para la tragedia que sacudió los departamentos de Albardón, Angaco, Ullum, Chimbas, San Martín y Caucete, que sería devastada por otro terremoto en 1977. El saldo fue de unos 10.000 muertos. Nunca tanta desgracia había caído sobre una ciudad argentina, y nunca nadie había enfrentado una emergencia tal como la enfrentaron los sanjuaninos aquella noche. Era sábado y faltaban ocho minutos para las nueve, de una tranquila noche de verano. Los hijos de esta tierra llevaremos por siempre en el recuerdo este episodio que enlutó a la nación.