Señor director:


Dicen que cuando ocurren desgracias es ahí cuando se conoce la esencia de las personas. Esa clase de desgracia suele suceder por ejemplo cuando llueve y una persona es peatón, ciclista o motociclista. Son ellos quienes más mal la pasan ante estos temporales, debido a que los conductores de automóviles y camionetas, en su mayoría, se les despierta el piloto de rally que llevan dentro. Entonces transitan rápido, levantan agua y mojan todo a su paso. No tengo dudas que los valores se inculcan en los hogares. No se le puede echar la culpa a los gobiernos. Entonces, estimados comprovincianos, respetemos a nuestros semejantes en la calle.