Señor director:

Bullying, término de origen inglés, es el acoso físico, psicológico o verbal que se ejerce sobre uno o varios alumnos por uno o más compañeros. Hasta acá la definición. Si bien el bullying siempre existió, hoy se ha convertido en un término de moda y como tal se aplica pero con un grado de agresividad y desprecio, producto de la falta de valores instalada en la formación de la actual generación de algunos jóvenes y niños. La crueldad de la práctica lleva a los afectados a realizar acciones extremas como lo es el aislamiento, baja autoestima, resentimiento y la muerte. A diario vemos ejemplos, tanto en las noticias periodísticas, como en las redes sociales.

El bullying siempre existió, el acoso se reducía a una burla o a un sobrenombre sin agresiones físicas y hasta diría que con tolerancia por parte de los afectados. Tal vez, lo viví así, por pertenecer a una comunidad de pueblo chico donde todos nos conocíamos y éramos amigos. Recuerdo que una de las cosas que más se castigaba y al castigo lo relaciono con bullying, era el hecho de ser madre soltera.

Los hijos adquirían el apodo de los padres ausentes pero conocidos. Entonces los secretos a voces se hacían públicos cuando los niños en la escuela, heredaban el nombre del progenitor, pero no su apellido. Otra forma de bullying era el que se castigaba con apodos a los portadores de algún defecto físico. En todos los casos aceptaron los nuevos nombres y egresaron de la escuela sin rencores ni venganzas. Hoy todos mayores, abuelos, en cada reencuentro o recuerdo se nombran por el apodo sin mencionar el verdadero nombre y es aquí donde me permito aplicar aquello que dice "todo tiempo pasado fue mejor”.

Lidia Dina Herrera
DNI 10.405.116
Grupo Literario "Las Ñustas y el Sol”