Señor director:


Por este medio quiero comentar la situación por la que estamos atravesando. En mayo de este año mi madre tuvo una fractura de cadera, por lo que se debió someter a una cirugía para un implante de una prótesis de cadera. Esto llevó algunos días de internación. Luego, y después de una segunda internación por otras complicaciones, falleció el 16 de junio de este año. Ella era jubilada docente, afiliada al gremio de UDAP, por lo que se le hacían descuentos importantes de su sueldo (según figura en su último recibo de sueldo eran $1.829,96 entre lo que representaba nada más que UDAP). Por los gastos que tuvimos que cubrir encierran un monto de $12.564 solo del mes de mayo, que debe reintegrar el Coseguro de UDAP (las fechas de los comprobantes emitidos para el reintegro van desde el 22 al 31 de mayo de este año). Al día de hoy, no se nos reintegró ni un centavo y ya pasaron 82 días de que se debió hacer efectivo el primer pago. No sólo esto es lo que afecta, sino las vueltas que nos hacen dar poniendo excusas tales como que no tenían la habilitación de la firma, después que el pago lo harían por una transferencia y debía llevar el Nº de CBU, después que necesitaban el ticket original del banco con el CBU, y así lo van pasando de semana tras semana. Esto representa gastos de tiempo y dinero en viajes al gremio. Pero mi gran duda es qué hicieron y hacen con el dinero de los afiliados, porque estos retrasos (a como están las tasas de interés) pueden generar alguno que otro interés en una inversión bancaria. Se evitarían sospechas si los pagos fuesen en plazos coherentes. Considero que los docentes no deben dejarse engañar a la hora de elegir quiénes conduzcan el gremio.

Raúl Aníbal Sarmiento 
DNI 17.175.310 
Rivadavia