Jorge Durán

Circula por youtube un famoso reportaje que a Roberto Goyeneche le hiciera el gran Antonio Carrizo. En un momento determinado, Carrizo le pregunta por los cantores que más le gustaron. Sin dudarlo, Goyeneche se refirió primero al "gallego'' Floreal Ruiz, y a renglón seguido, nombró al cantante de origen sanjuanino, Jorge Durán, de un gran registro de voz. Era barítono, y al decir de Goyeneche no suficientemente reconocido. Durán había nacido en Albardón, en 1924 y cantar fue su pasatiempo favorito, brillando en los actos escolares. Hijo de inmigrantes andaluces, como tantos otros ayudaron en las tareas entre frutales y viñas de sus padres, quienes incluso tenían una bodeguita. Después emigraron a Buenos Aires en 1942. Durán, quien en realidad se llamaba Alfonso Jesús Durán, comenzó a tentar suerte en café y bares de la gran ciudad. Más tarde, el bandoneonista Jorge Argentino Fernández lo contrató para su orquesta y al poco tiempo ya debutaba en Radio Mitre. Por esos años de la década de 1940, andaba por Buenos Aires difundiendo el folklore cuyano don Buenaventura Luna, con su Tropilla de Huachi Pampa. A ella se agregó Durán, con el nombre artístico de Alfonso Durán, y llegó a grabar algunas canciones folklóricas. Pero alentado por sus amigos Roberto Rufino y Alberto Marino, se inclinó por cantar tangos. Con la orquesta de Emilio Balcarce graba sus primeros temas que fueron "Mi Buenos Aires Querido'' y "Me están sobrando las penas''. Su fama fue creciendo rápidamente y llegó la hora en que Carlos Di Sarli lo escuchara cantar en un salón nocturno e inmediatamente lo incorpora a su orquesta. Pero esa tarde ocurrió algo curioso: cantó con Balcarce por la tarde, en radio Belgrano y por la noche se produjo el debut con Di Sarli en Radio El Mundo. Así arranca una etapa que duró apenas dos años, pero que fueron las más brillantes del cantor que, por sugerencia de Di Sarli, cambió su nombre artístico por el de Jorge Durán. Aparte, le pidió que cantara en un tono más alto, lo que hizo sin problemas pues tenía un registro vocal muy amplio. Fue un barítono que imprimía gran fuerza y dramatismo a sus interpretaciones. Pero no caía en ningún exceso. No le faltaba ductilidad y su dramatismo era más bien un lamento romántico. Le apodaban "Cajón''. Entre 1947 y 1950 anduvo por las orquestas de Pedro Láurenz, Horacio Salgán y José Basso. Con este graba 12 registros, y 3 años luego pasa por las típicas de Osmar Maderna y Francisco Rotundo. Entre 1956 y 1958 vuelve a cantar con Di Sarli, y esta vez graba 19 temas. Con Roberto Florio, gran amigo suyo, forma una orquesta propia, bajo la dirección del pianista Orlando Trípodi. Falleció en 1989 a raíz de un efisema pulmonar. Junto con otro sanjuanino, Alberto Podestá, supo adecuar su fraseo al típico de los porteños y así lograron imponer su estilo.

Por Orlando Navarro
Periodista