Señor director:
La miel es elaborada por las abejas a partir del néctar que ellas toman de las flores. Las mieles medicinales son de color más oscuro que las de mesa. Las medicinales son más ricas en sales minerales como calcio, fosfato y hierro. Son elaboradas a partir de flores de eucalipto, menta, azahar (flor del naranjo), toronjil, romero y otras.
La miel, debido a sus virtudes, se la considera como alimento. A la vez como medicamento. Su consumo casi no presenta contraindicaciones (casos en que puede perjudicar). Es de digestión fácil y total, ya que pasa a la sangre en forma directa. Contiene hidratos de carbono en un 80%, compuesto por levulosa, glucosa y sacarosa; sustancias proteicas en un 1% y sales de calcio, fosfato y hierro. Es recomendada en los casos de reumatismo y afecciones respiratorias, por tener una pequeña cantidad de ácido fórmico (es antiséptico y disolvente) y aceites que se hallan en diversos vegetales.
Son muchas las propiedades de la miel y su consumo es recomendable para casi todas las personas, tanto sanas o enfermas, niños o ancianos. Además es laxante suave, siendo antipútrida, antifermentiva, antiséptica (combate o previene las infecciones); es cicatrizante, calmante, tónica, diurética, antirraquítica, y otras propiedades. También se usa en aplicaciones externas como antiséptico. Lamentablemente, la miel es también objeto de adulteración, por lo cual se recomienda adusar mieles sólidas, o sea cristalizadas en forma natural, las cuales son más difícil de adulteración y son una garantía de pureza.
Las mieles líquidas, aunque pueden ser puras, a veces se mantienen en ese estado, por el agregado de glucosa comercial.