Señor director:


Para responder a todo lo que comporta la Cuaresma, el Papa Francisco propone emprender el camino cuaresmal con la oración, la limosna y el ayuno. A propósito de la oración, recuerda que nos permite descubrir las "mentiras secretas'' con las cuales nos engañamos a nosotros mismos. A su vez, la limosna nos libera de la avidez y nos ayuda a reconocer en el otro a un hermano, mientras que el ayuno nos despierta y desarma nuestra inclinación a la violencia. Un camino sencillo para afrontar el crecimiento del mal que tantas veces nos oprime.