Señor director: 


Me dio mucho gusto encontrar hace unas semanas en una de las playas de Mar del Plata dos esculturas realizadas en arena, de una de las principales atracciones que tiene nuestra provincia, el Parque de Ischigualasto o Valle de la Luna. Se trataba, por un lado, de un dinosaurio con un fondo rocoso y, por otro, la formación del conocido hongo. 


Lo curioso de esto es que el autor no era un sanjuanino fanático de su provincia, sino un marplatense al que le habían pedido que hiciera esa obra. Otra curiosidad es que cuando le preguntaron si conocía el Valle de la Luna, aseguró que nunca había estado en ese lugar y que solo tenía referencias por fotografías y algunos comentarios que le hicieron al convencerlo que haga la escultura. 


De todas formas quedó muy bien, porque fue uno de los atractivos que tuvo durante varios días el stand que se había montado en "La feliz'' para promocionar la Fiesta Nacional del Sol, entre otras atracciones de nuestra provincia. 


Es muy importante que la promoción turística que se realiza de San Juan en lugares que son turísticos por excelencia, tengan una adecuada planificación ya que es muy difícil plantear la propuesta en sitios que son elegidos masivamente, que ofrecen numerosos atractivos y que todos los años acaparan la preferencia de gente de todo el país. La propuesta debe ser clara, contener elementos de seducción y, por sobre todo, direccionada a público que pueda llegar a sentirse persuadido de llegar a San Juan para ver algo diferente.