Señor director:


Soy de Astica, Valle Fértil. Desde hace muchos años que vivo en Buenos Aires. Sin embargo, siempre leo DIARIO DE CUYO, para enterarme de las noticias de San Juan, pero también de los pueblos alejados a la gran capital de los sanjuaninos. Al leer la nota sobre esa niña adolescente que embelleció los lugares públicos del pueblo con pinturas, me emocioné hasta las lágrimas. Si, la historia de esta chica que tuvo que emigrar por el trabajo de su papá, pero que nunca se olvidó de donde nació.


Gracias a vuestro diario por contar historias que suceden en todos los departamentos alejados de San Juan, como también en sus respectivos pueblos, que a veces son remotas y hasta de difícil acceso.