Señor director:


Un país donde no se respeta la historia, sus próceres, símbolos patrios, autoridades, ni entre los miembros de su comunidad, sin lugar a dudas, esa nación no tiene buen futuro. En Argentina hay grupos que dicen y hablan sobre pueblo, trabajadores y muchas palabras bonitas. Pero lo único que quieren es tomar el poder, de prepo, utilizando la democracia como pantalla. Cualquier protesta en Plaza de Mayo es para agredir a la patria, como sucedió el pasado miércoles con el cabildo. Recién pintado, luego de una protesta, otra vez, los argentinos debemos soportar esta clase de atropello. No hay motivos ni excusa para agredir la esencia de nuestra nación.


Es de esperar que el Congreso de la Nación sancione leyes que castiguen esta clase de agresiones. La Capital Federal no es territorio sólo de los porteños, sino que además es parte de Argentina y estos desmanes provocados por desestabilizadores se ven en todo el mundo.