Señor director:
Estamos a unas horas de celebrar la Navidad, es decir, la conmemoración del nacimiento de Jesús, el Hijo de Dios, el Redentor, el Cordero de Dios que vino a quitar los pecados de la humanidad. Es un tiempo imperdible para acercamos a Él con fe, creyendo de corazón que es así, para que nos llene de su paz. Es por eso que todos tenemos la esperanza de que esta Navidad podamos recibir esa gracia del Todopoderoso, su bendición para perdón de nuestras faltas y la misericordia anhelada, de que nos libre de todo mal. Esta fecha es muy especial para orar en familia, pedir por la salud, para que todo virus desaparezca y que el amor y misericordia del Señor abunde en nuestra provincia, el país y demás naciones de la Tierra. Es momento de acercarnos a aquel que nos da la vida. Debemos animarnos en la fe. Estoy seguro que hay esperanza. Que Dios nos dará nuevas oportunidades de mejorar. En nuestras manos está la ocasión de hacer las cosas bien, de ser honestos, decentes y realmente amar al prójimo, desechando el egoísmo y todo aquello que no sea destinado al bien común. En esta Navidad es necesario estimularnos a la fe en Dios más que nunca. En Él está la salida.
Ramón Ochova
Poeta – Periodista
