Señor director: 

No podemos quedarnos con una frase que se usa de cabecera como: "es cultural". Con esa frase, se justifican conductas que son antisociales, sin solidaridad para con el resto de la comunidad. Me refiero de manera específica a las personas que arrojan residuos a los canales de riego. Estos transportan el agua que viene desde la cordillera para el consumo humano. También riegan nuestros campos, nuestras chacras. Y, por ende, sirven para que beban agua nuestros animales en las zonas rurales. 

De una buena vez, se torna indispensable que estas acciones delictivas, pasen de la Justicia de Faltas a la Justicia Penal. No se puede permitir que se arroje basura a los cauces de agua. Y, en caso de hacerlo, las penas deben ser de prisión. 

Se necesita que realmente haya justicia, porque se cometen abusos que conspiran contra todos los habitantes e incluso el medio ambiente de la provincia de San Juan. 

Todo esto que digo es en base a que ya se han llevado a cabo innumerables campañas desde organismos oficiales para lograr que muchas personas inescrupulosas dejen de arrojar residuos a los cauces de agua. Creo que también es tiempo de que la Justicia actúe con mayor rigor.