Señor director:
Pasó más de un siglo para que se reconociera la lucha por la Independencia de un general que comandaba al Ejército del Norte. Se trata de Martín Miguel de Güemes, a quien el Congreso Nacional dispuso que el 17 de junio de cada año se le rindiera homenaje con un polémico feriado nacional, cuya discusión referida a que no corresponde o sí, no pone en duda de que Güemes fue una importante figura de nuestra historia.
Lo que no tendría que tener ninguna discusión es en la celebración del 11 de Septiembre, en homenaje al "Maestro de América", Domingo Faustino Sarmiento, quien sembró de escuelas el país y su obra es tan basta que no alcanzarían estas pocas líneas para enumerarla.
Este prócer sanjuanino y argentino, fue menoscabado, insultado y agraviado de muchas formas, en especial desde el año 2003 al 2015. Es por eso también, que debe tener en los sanjuaninos, a sus más férreos defensores. Es tiempo que desde San Juan, salgamos a predicar educación al país, porque estamos en la delgada línea roja de elegir entre dos estilos de vida, la civilización o barbarie, como lo describiera Sarmiento.
El "Día del Maestro" es muy necesario que se celebre no sólo como un feriado provincial. Si, celebrar en todo el país, no sólo conmemorar, porque la educación es el arma más importante de un pueblo para vencer la ignorancia, combatir la corrupción, la pobreza y la dependencia.
Sarmiento fue un paladín de la educación. Un gobernador de San Juan y presidente de la Nación, que
puso los cimientos para que muchas generaciones de argentinos, se realizaran como profesionales y trabajadores capacitados en los diferentes oficios. Por su obra, todavía podemos decir que tenemos las universidades más prestigiosas de la región. Nos dejó un legado que nosotros, los hijos de esta tierra sanjuanina tenemos que llevar adelante.