Hasta el próximo 22 de enero continuará habilitada en el Grand Palais de París, la exposición de más de 200 obras del pintor francés Paul Gauguin. La muestra fue inaugurada el 11 de octubre del años pasado y ya ha sido visitada por numeroso público de todo el mundo.
Es una importante retrospectiva en la que se muestran pinturas, esculturas, cerámicas y dibujos.
Gauguin nació en París en 1848, pasó su infancia y adolescencia en Lima. Enrolado en la Marina mercante recorrió diversos lugares y se casó con una dinamarquesa. De regreso a su país natal, estuvo en contacto con Van Gogh y con Cézanne. En la última parte de su vida se trasladó a la Polinesia francesa, donde falleció en 1903.
En el inicio de la muestra se observa en la pintura de Gauguin influencia de Degas y de Pissarro. Luego se advierten en sus obras búsquedas formales. La tercera etapa vibra con el colorido de su vida en Polinesia.
Paul Gauguin llevó a sus lienzos el colorido salvaje y plano de los paisajes lejanos. Polinesia fue una incursión a lo exótico y la búsqueda de otra forma de vida, una existencia armoniosa acorde a la inocencia de los nativos.
Alejado de la cultura occidental, deslumbrado por el paisaje tropical, el pintor parisino buscaba lo primitivo de la raza humana. Rindió homenaje a la belleza de esas mujeres, a la exuberante naturaleza de las islas lejanas.
Los parajes paradisíacos, que plasmó en su obra, hicieron de él uno de los precursores del arte moderno. Rechazó la perspectiva, y pintó amplias zonas planas con colores encendidos.
El ambiente tropical le inspiró pinturas llenas de primitivismo y simbolismo. El entorno lo motivó y pintó con tonalidades vivas. En sus cuadros están la luz y las mujeres de rasgos exóticos. Las tradiciones nativas y el paisaje exuberante enriquecieron su paleta con gran fuerza expresiva. Supo representar toda la magia de los trópicos, sus cuadros son un canto a la naturaleza. Buscó la intensidad del color y la liberación de las formas.
Gauguin formuló un nuevo lenguaje plástico que influyó en vanguardias y artistas de principios del siglo XX. Su obra abrió nuevos horizontes estéticos en las generaciones posteriores.
En febrero de 2015 uno de sus cuadros fue adquirido en trescientos millones de dólares por un comprador de Qatar.
Los visitantes de la exposición parisina pueden observar la trayectoria de Paul Gauguin que ejerció importante influencia en el movimiento expresionista.
