
Señor Director:
Tenemos hoy la oportunidad de crear políticas educativas para generar docentes calificados que la sociedad necesita. La Universidad, como parte de la comunidad, tiene la misión de transmitir sus conocimientos a la sociedad que la mantiene con sus impuestos. Debe buscar la forma de contribuir a la educación y a la mejor vida de todos. Su trabajo de formación y de investigación debe redundar en beneficio de la población ocupándose de los problemas regionales, nacionales e internacionales, cumpliendo así con su trabajo de extensión.
Próximos a elegir autoridades universitarias en nuestra provincia, los estamentos deberán implementar nuevas formas de educación, para enseñar, aprender, comunicarnos y ayudarnos.
Hoy se vive la "economía del conocimiento" y no la economía de las materias primas y los recursos naturales. El gran recurso lo constituye el cerebro de la gente. La pobreza se resuelve con la educación y no es posible la educación en medio de la pobreza y la mala alimentación. Hoy podemos aprender "cómo saldar las deudas del pasado y cómo armar los retos del futuro".
Debemos lograr una activa relación entre Universidad y Sociedad, siendo imprescindible la rendición de cuentas y el empleo de mecanismo de autoevaluación y acreditación tal como fija la ley.
Por todo ello, es necesario construir una estrecha conjunción entre Estado-Sociedad-Universidad que permita mejorar los niveles de pertenencia en lo social, en lo académico, en lo económico y en el sector productivo del país.
Colaboremos todos en una nueva educación y toda innovación produce resistencia, sin convicción no hay acción, se requiere liderazgo y el cambio debe ser lo único y lo permanente. Los retrasos en educación tardan mucho tiempo en subsanarse.
Roberto Olivera Vega
Periodista
