
Faltan apenas unos días para que comience la larga temporada de primavera-verano. La de las altas temperaturas, constantes y tortuosas jornadas que traen consigo problemas de los que hasta ahora no están en la agenda pública y debería ponerse especial importancia. Me refiero a la lucha contra el dengue. Porque esta pestilencia, sumada al coronavirus se transformaría en un cóctel de enfermedades cuyas consecuencias serían inimaginables en la salud y vida de las personas, como en la actividad productiva y comercial, en definitiva la actividad económica de la provincia.
Hasta marzo de este año, la situación era amenazante, con infectados en provincias vecinas, como La Rioja y algunos casos detectados en el Sur de nuestro San Juan. Esto, sumado a las restricciones por causa del Covid-19, por todos conocidos, nos tiene que llevar a tomar medidas, ya sea en lo particular como en lo colectivo. Es cierto que algunos municipios como los de Valle Fértil, Caucete, Rawson, Rivadavia, entre otros, trabajaron en fumigar distintos lugares de sus departamentos. Pero, eso fue hasta marzo. Ahora, la lucha continúa. Es por eso que urge la necesidad de que las autoridades provinciales, en conjunto con las municipales y todos los sanjuaninos, comiencen a trabajar en ese sentido.
Una de las primeras acciones que se deben hacer son las campañas de prevención que incluyan el cuidado del medioambiente, manipulación de residuos domiciliarios, como también fumigaciones en barrios y lugares suburbanos. La higiene vecinal es un factor fundamental para lograr el éxito de esta tarea. Esa creo que es una de las mejores maneras de cuidarnos entre todos. Es decir, coordinando acciones en las que estemos todos los ciudadanos comprometidos en pos del bien común, como en este caso, evitar otra crisis sanitaria.
Manuel Marín
DNI 10.893.933
