Señor director:

En el departamento Sarmiento estamos acostumbrados a una forma poco trasparente en la selección de adjudicatarios de viviendas para barrios construídos a través de diferentes operatorias. Al decir poco transparente, simplemente digo que se desconocen los criterios con que se eligen a los futuros beneficiarios.

Con el tiempo, los sarmientinos hemos naturalizado un proceder que indigna y hasta parece ser una burla hacia los sarmientinos. Aún así, llenos de esperanza se continúa en vano inscribiéndose décadas tras décadas en el IPV. Si, décadas tras décadas. En tanto pasan los años, nadie a nivel provincial se interesa en el tema para poner fin a esta situación.

¿Algún lector leyó alguna vez un titular: "Sorteos de viviendas en Sarmiento? Claro que no. Pero ¿Por qué motivo, funcionarios con competencia en el tema se hacen los distraídos y miran hacia otro lado, en vez de interesarse en una cuestión tan delicada como es la selección de adjudicatarios? 

Esto exige pauta claras, y de público conocimiento, que permita la igualdad de oportunidades en el acceso a una vivienda para no tentar a nadie a que las reparta a su antojo, como si fueran de su propiedad.

Es absurdo a esta altura recordar que la democracia es una forma de vida y que fundamentalmente debe bañar todos los actos de gobierno, y no sólo una forma de elegir a quienes administran lo que es de todos.