El universo de la educación está en expansión, va más allá de lo local, más allá de las disciplinas tradicionales, del currículo, del propio espacio y tiempo. Los cambios en la sociedad son vertiginosos. Vivir en la era digital las constantes investigaciones de la ciencia sobre el funcionamiento del cerebro humano, son otras fuerzas que inciden en el aprendizaje para convertirlo en un proceso de conexión de diversas fuentes informativas. La educación no puede permanecer al margen de ello. "Educar obliga a dar respuesta a todos los interrogantes" (David Perkins).


Hoy el alumno debe ser protagonista de su propio aprendizaje, unido a la exigencia de poner a su alcance las oportunidades necesarias para poder llevarlas a cabo. Se aprende en el intercambio con otros. Así, facilita la relación y mediante el trabajo cooperativo, crea verdaderas comunidades de aprendizaje, de alumnos competentes no competitivos porque valoran y suman las diferencias. Un alumno competente es cuando sabe aplicar lo que aprende en diferentes contextos y situaciones, es capaz de controlar su aprendizaje, trabaja en equipo, es autónomo. Es necesario que aplique las competencias básicas como: tecnologías, competencia en comunicación lingüística, esencial saber leer, comprender e identificar las ideas principales, identificar las relaciones de causa y consecuencia, opinión personal, juicio crítico. Es así como esta competencia es común a todas las disciplinas. Conocemos que quienes ocupan los primeros puestos en educación como Singapur, Corea, Finlandia lo lograron trabajando con este enfoque pedagógico de las competencias, por supuesto, sumado a otros ingredientes que Argentina no tiene, como es la inversión educativa.


El alumno diseña el paisaje que le permitirá una eficaz inserción laboral. La clásica expresión "emprendimiento" se relaciona con el comienzo de una nueva empresa a convertirse en una gran compañía. Por lo tanto, los emprendedores, asumen riesgos, no temen al fracaso, al error en pos de capitalizar una oportunidad y alcanzar una visión de alto impacto que irá abriendo y desarrollando su carrera emprendedora.


La educación está disociada del mundo productivo e industrial. Recientemente el Ministerio de Educación puso en funcionamiento el Consejo Provincial de Educación Técnica, Trabajo y Producción. Esta actividad, tiene fundamental trascendencia para los futuros egresados de las escuelas técnicas, agrotécnicas, su desarrollo profesional y laboral, dado dentro del marco de la Ley de Educación Técnica 21.058, "Es necesario que las cámaras empresariales participen a fin de conocer el perfil de profesionales que requieren, especialmente ante las expectativas que se tienen en el futuro por la construcción del "Túnel de Agua Negra". El desafío es formar alumnos a fin de que se inserten acorde a los cambios productivos y laborales de la provincia. Así fortalecerán el arraigo en cada uno de los departamentos donde residen.

Hoy las competencias más requeridas por las empresas son la capacidad de "trabajar en equipo".

Estas acciones suceden a nivel provincial, pero a nivel del Ministerio de Educación de la Nación, no existe un "Proyecto Educativo", aún el "Plan Maestro", nunca llegó al Congreso como anunciaban desde Nación.