Zoellick está pidiendo una "nueva agenda” para mejorar las relaciones entre Estados Unidos y Latinoamérica. En una entrevista, Zoellick se explayó sobre las propuestas que planteó el 7 de junio ante el Diálogo Inter-Americano, un centro de investigación de Washington, donde sugirió revivir los planes de crear un área de libre comercio regional. Es una idea virtualmente muerta desde que los países latinoamericanos rechazaron el Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) de George W. Bush en la cumbre de 2005 en Mar del Plata.
Estados Unidos debería desempeñar "un rol catalizador y de liderazgo, y no hace nada”, me dijo Zoellick, refiriéndose a la necesidad de revivir las negociaciones comerciales intercontinentales. Agregó que "sería un error estratégico (no iniciar negociaciones), porque parte de la resurrección de EEUU depende de su integración con el mundo, incluyendo nuestro propio hemisferio”.
¿Cómo pretende revivir las negociaciones comerciales regionales, cuando pocos en Washington le prestan atención a Latinoamérica, y muchos países latinoamericanos no desean mejorar sus relaciones con EEUU?, pregunté. "Estamos entrando en una nueva fase, en la que los internacionalistas de Estados Unidos, que tradicionalmente se centraron en Europa y en Asia, y en cierto grado en el Medio Oriente, deben incluir también a Latinoamérica en sus evaluaciones”, dijo Zoellick.
Con respecto a la reticencia de muchos países latinoamericanos a mejorar sus vínculos con EEUU, Zoellick dijo que parte de esa resistencia tal vez ya se haya reducido, porque EEUU empezó a rebajar los subsidios a la agricultura y al etanol que Brasil y otros países de la región critican desde hace tiempo. Zoellick dijo que Washington podría empezar por crear un bloque comercial con aquellos países que ya tienen acuerdos de libre comercio -México, Canadá, Colombia, Perú, Chile y algunos de Centroamérica-, y más tarde extenderlo para todos. Se podría empezar con un "ALCA de los dispuestos” y recordó que los acuerdos existentes ya representan el 54% del PBI de las Américas, sin incluir a EEUU.
Si se organiza este "ALCA de los dispuestos”, se podría contactar a algunos miembros de la comunidad empresarial de Brasil. Con el tiempo, se podría convencer a Brasil a adherirse, ya que se están reduciendo las restricciones estadounidenses al etanol brasileño, agregó Zoellick.
En un momento en que China está negociando un acuerdo de libre comercio con sus vecinos asiáticos, tanto EEUU como Latinoamérica se beneficiarían creando cadenas de producción regionales, para que sus empresas competan mejor con los asiáticos. Es un tema que los líderes políticos de Washington ya no pueden seguir ignorando.