Considerado como el combustible de mayor demanda futura, el biodiesel nacional se consolida hasta ubicar a la Argentina en el cuarto lugar entre las naciones más avanzadas del mundo en capacidad de producción de este carburante ecológico, detrás de Alemania, Francia y Brasil.
La producción local de biodiesel alcanzó el año pasado 1,9 millón de toneladas, lo que representa un alza de 51% respecto de 2009 y una marca histórica desde que comenzaron a desarrollarse los biocombustibles en el país, según un informe de la Cámara Argentina de Energías Renovables. La capacidad instalada permite una producción de 2.487.000 de toneladas, con proyecciones para fines de 2011 que superará las 3 millones de toneladas. El corte obligatorio interno de biodiesel se amplió a un 7% (B7) y el objetivo de las autoridades de Energía apunta a ampliarlo al 10% (B10) a partir del corriente año, lo que constituye una gran motivación para mayores inversiones del sector privado. En este sentido, si bien otros países productores, como Brasil, han informado que ampliarán sus cortes obligatorios, Argentina ya tomó la delantera regional, marcando otro hito en la reconversión energética.
La industria nacional del biodiesel cuenta ahora con tres mercados: el de Corte Obligatorio (B7) con un 43%, el de exportación con el 51% y el GENREN (electricidad) con el 6%, que, además, busca promover la industria de los biocombustibles y diversificar la matriz energética.
Argentina tiene un liderazgo en este rubro que requiere mayor apoyo oficial para seguir avanzando. Recordemos que hasta se ha experimentado con éxito el uso aeronáutico de biocombustible, abriendo otro campo de proyecciones ilimitadas.