La actividad física es cada vez más importante para la calidad de vida del ser humano. Entre las nuevas tendencias esta el plogging, que es furor a nivel internacional

 

Por un lado el furor del plogging. Por otro, científicos de la Universidad de Harvard dicen cómo la actividad física ayuda a vivir mejor y por último, entrenar para combatir la depresión. Estas son en la actualidad algunas de las tendencias en el mundo. Es un común denominador cuidar la salud y la calidad de vida en general teniendo en cuenta la actividad física como base. Esta conducta creció a pasos agigantados después de haber atravesado una pandemia que cambió la forma de vivir en la sociedad mundial. Lo mismo ocurrió con la necesidad de involucrarse en acciones para detener el calentamiento global que cada vez alcanza a más personas. De este interés genuino nació el plogging, una nueva tendencia deportiva para aquellos que eligen ir más allá, que no sólo se preocupan por su propio bienestar sino que también se interesan por la ecología. Una actividad simple y motivadora que no tiene límites de edad. 

 El equipo subrayó que el principal beneficio para la salud de la actividad física es la prolongación de la esperanza de vida humana, que se define como los años de vida que se pasan con buena salud.

"Este movimiento tiene una visión clara que consiste en lograr un mundo más limpio. La idea es bastante simple: sólo hay que sumar el ejercicio de levantar basura en el camino mientras realizás una actividad deportiva, como si se tratara de obstáculos que aportan dificultad al entrenamiento”, dijo a la prensa Paula Gosso Eguia, médica veterinaria, oriunda de Mar del Plata y quien está al frente del movimiento Plogging Argentina. Además, un informe de la ONU, el 79% de la basura generada del plástico se encuentra en vertederos o tirada en el medioambiente y sólo el 9% se recicla”.

ORÍGENES Y AUGE MUNDIAL

El impulsor de esta actividad fue el sueco Erik Ahlström, que al dejar su pueblo en 2016 para instalarse en Estocolmo, empezó a limpiar la basura en los lugares que frecuentaba cuando hacía deporte. El auge se dio por la cantidad de basura con la que se encontraban los runners, desde botellas, latas, papeles y más. Entonces se ocuparon de limpiar sus rutas de recorrido y descubrieron que a la actividad de correr se le sumaba un ejercicio extra que es el movimiento de la sentadilla que implica agacharse a levantar los residuos. De esta manera, la tendencia que comenzó en Europa, se extendió por una gran cantidad de países, llegando a Estados Unidos y sumando cada vez más adeptos en Latinoamérica.

VIVIR MÁS Y MEJOR

Un estudio científico realizado por investigadores de la Universidad de Harvard, de los Estados Unidos, derribó un mito sobre las personas mayores. Muchos creían necesario bajar el ritmo de actividad física a medida que las personas pasan los 60 años de edad. Pero lo cierto es que el cuerpo no debe jubilarse de la actividad física. El estudio fue publicado en la revista especializada PNAS publicada por la Academia de Ciencias de los Estados Unidos. Presenta pruebas evolutivas y biomédicas que demuestran que los seres humanos evolucionaron para vivir muchas décadas después de reproducirse y para ser relativamente activos en sus últimos años. Los investigadores afirman que la actividad física en edades avanzadas desvía la energía de los procesos que pueden comprometer la salud y la dirige hacia los mecanismos del cuerpo que la prolongan. Su hipótesis es que los seres humanos evolucionaron para mantenerse físicamente activos a medida que envejecen. Al hacerlo, se asigna energía a procesos fisiológicos que frenan el deterioro gradual del cuerpo con el paso de los años. Esto protege contra enfermedades crónicas como las cardiovasculares, la diabetes de tipo 2 e incluso algunos cánceres.

30 MINUTOS CONTRA LA DEPRESIÓN

Investigadores de la Universidad de Basilea en Suiza detectaron que el ejercicio físico ayuda al bienestar general de los pacientes y no afecta la conciliación del sueño. Completar 30 minutos de ejercicio aeróbico de intensidad moderada al final del día puede ayudar a mejorar el estado de ánimo en pacientes con depresión unipolar y no afecta negativamente el sueño, sugirió un reciente estudio.

Según precisa la Clínica Mayo, hacer ejercicio con regularidad puede ayudar a aliviar la depresión y la ansiedad, y permite:

  • Liberar endorfinas, sustancias químicas cerebrales naturales que pueden mejorar la sensación de bienestar.
  • Quitar preocupaciones, para alejarse del ciclo de pensamientos negativos que alimentan la depresión y la ansiedad 

 

El ejercicio regular también tiene muchos beneficios psicológicos y emocionales. Puede ayudar a:

  • Ganar confianza. Alcanzar las metas o los desafíos del ejercicio, incluso los más pequeños, puede promover la confianza individual.
  • Interacción social. El ejercicio y la actividad física pueden dar la oportunidad de conocer a otras personas y socializar con ellas. Un simple gesto como intercambiar una sonrisa amistosa o un saludo al caminar por el barrio puede mejorar el estado de ánimo.
  • Enfrentar problemas de manera saludable. Hacer algo positivo para controlar la ansiedad o la depresión es una estrategia sana.

 

Por Gabriela Arias, agencias Reuters, EFE
y Redacción DIARIO DE CUYO