Según el último informe anual sobre el clima del planeta, publicado el martes último por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA), el calentamiento aumentó el año pasado a niveles alarmantes igual que las emisiones de dióxido de carbono (CO2) hasta un punto de no retorno si no hay un giro en la contaminación ambiental.
El estudio, en el que participaron 380 científicos de 52 países, revela que 2012 tuvo el récord de temperatura en aumento de la última década, consecuencia mayores emisiones de gases de efecto invernadero, lo que produjo el incremento del nivel del mar y un deshielo ártico sin precedentes. La extensión helada del Océano Ártico disminuyó a 3,41 millones de km2, o un 18% menos del récord anterior en 2007; la capa de hielo de Groenlandia se redujo a un mínimo histórico en julio de 2012 y el 97% de la superficie muestra señales de derretimiento porque las temperaturas están aumentando dos veces más rápido que en el resto del mundo. Por la licuación de los hielos árticos el promedio del nivel del mar en el planeta alcanzó un máximo histórico en 2012, 3,5 centímetros por encima de la media de 1993-2010.
Ante el alerta de la NOAA, el presidente Obama anunció medidas para hacer frente a las emisiones de CO2, principalmente de las usinas a carbón. Estados Unidos, el segundo mayor contaminador del mundo después de China, que se resiste a cambiar su matriz energética.
Queda como consuelo que el clima en la Antártida sigue "relativamente estable en general", y que no aumentaron las tormentas tropicales en 2012, con 84 eventos, menos que el promedio anual de 89 entre 1981 y 2010.