La institución no gubernamental, llamada Buena Voluntad Mundial, observa los problemas actuales con una óptica diferente en base a objetivos con los que nadie puede disentir. Busca estimular y alentar a todas las personas de buena voluntad a establecer rectas relaciones humanas entre razas, clases, naciones y religiones mediante "’la comprensión inteligente y una adecuada comunicación”.
Sus premisas proponen actividades constructivas para que se contribuya a la unidad y estabilidad de las relaciones humanas, de manera que se pueden alcanzar metas futuras de la humanidad sin las tensiones ni las desinteligencias actuales. Se afirma que la buena voluntad será una tónica de una nueva civilización y se sugiere apoyar el trabajo de las Naciones Unidas y sus agencias especializadas como la mejor esperanza para un mundo unido y pacífico. La comprensión inteligente uno de los objetivos- debe ser esa disposición del hombre para observar todo lo que sucede como efectos de una causa mayor que va desde el destino de una persona común a los intereses reales de toda una sociedad.
Cuando un ser humano promedio habla del destino se refiere a una fuerza desconocida que, según se cree, actúa sobre los hombres y los sucesos. Destino es una palabra muy usada pero con una significación que a veces es inalcanzable. El segundo objetivo de la buena voluntad es "una adecuada comunicación”, seguramente apelando al uso responsable del desarrollo tecnológico. Es que la afluencia comunicacional puede ayudar a causas nobles y a otras que no lo son tanto porque todo depende de la intencionalidad de quien actúa.
El trabajo arduo y difícil de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y sus agencias especializadas, debería ser tomado en cuenta por todas las personas que entienden que el futuro del mundo debe ser cada vez más integrador en base a la cooperación y la buena voluntad de los pueblos sustentados en el derecho internacional, la paz y seguridad en todos los ámbitos de la integración global. De ello dependen el desarrollo económico y social, los asuntos humanitarios y los derechos humanos que actualmente presentan grandes desigualdades entre las diferentes naciones miembros del organismo mundial porque los regímenes totalitarios impiden las libertades supremas y la convivencia pacífica.
