Las condiciones del mundo contemporáneo, la compleja realidad geográfica y el deterioro ambiental, exigen un cambio educativo que mejore sustancialmente la posibilidad de formar matriz de opinión. Así también, la elaboración de iniciativas de cambio, los problemas ambientales, a la que superan la acción pedagógica atendiendo los desequilibrios ecológicos. El Gobierno de la provincia, este mes lo declara "Mes del Ambiente y Desarrollo Sustentable" con acciones que apuntan al mejoramiento ecológico. La educación ambiental va dirigida a formar valores, actitudes y conductas a favor del ambiente. Esto está expresado en la política educativa de la provincia a través del "Programa Provincial de Educación" y contenidos trasversales. Hay principios básicos como el hogar, la escuela, el municipio, quienes deben mantener estrechos contactos y producir acciones conjuntas. La educación ambiental se apoya en una ética que compromete a todos promoviendo así, el desarrollo crítico e innovador, personas capaces de observar la realidad, elaborando alternativas y nuevos modelos de pensamiento. 


Recientemente conocimos un anuncio del presidente de EEUU, Donald Trump, quien manifestó que su país se retira del acuerdo de París sobre el clima. Afirmó que tras la salida buscará un mejor pacto "más justo". Además agregó que el acuerdo bloquea el uso y desarrollo de carbón limpio. Su país será amigable con el ambiente pero no cerrará empresas. El mundo entero lo calificó como un desastre. 


Hoy hay grandes desafíos como mostrar que la naturaleza puede convertirse en un hábitat seguro. Para ello, los seres humanos deben tener una relación de responsabilidad para habitar un ambiente sano y renovado. Difícilmente una sociedad que no tenga como valor cultural el ambiente, sepa cómo actuar. Poco a poco y lentamente, los efectos de la acción humana han deteriorado el entorno natural. Nuestra meta debe ser siempre mejorar las relaciones ecológicas incluyendo las del hombre con la naturaleza. Científicos y expertos estudian cómo está cambiando el clima del planeta en distintas formas. Ellos afirman cómo "La Tierra" se ha calentado dramáticamente en los últimos 140 años y que en la actualidad es más cálida que en los 60 últimos años. La aglomeración en los grandes centros urbanos implica estilos de vida generalmente sedentarios y ambientes sociales expuestos a riesgos para la salud, desde la calidad del agua o del aire, hasta las enfermedades infecciosas. 


Otros factores influyen como el talado o quemado de enormes superficies de los bosques naturales provocando también desaparición de gran parte de la fauna. Tenemos como ejemplo el gigantesco y maravilloso Amazonas, ello es un triste ejemplo. Sabemos que debido al aumento de la temperatura de la atmósfera, se están derritiendo gigantes volúmenes de hielo de las regiones polares. Argentina pierde sus glaciares a velocidad inusitada. El principal problema, es que el ser humano, adolece de tener conciencia colectiva. Si aspiramos a un futuro libre de contaminación, tenemos que estar dispuestos a cambiar nuestros estilos de vida y el derecho lo otorga nuestra Constitución Nacional artículo 41 "Todos los habitantes gozarán del derecho de un ambiente sano, equilibrado, apto para el desarrollo humano...". La conservación del ambiente, consiste en el uso racional de los recursos que nos brinda la naturaleza.