El hecho de que la ciudad de Buenos Aires se haya convertido en la capital con el mayor número de congresos y convenciones de América, durante 2012, y se encuentre entre las primeras 19 a nivel mundial, es el resultado de un trabajo de promoción y preparación de todos los sectores prestadores de servicios que intervienen en estos eventos.
No es casualidad que esta ciudad fue elegida el año pasado para la realización de 99 encuentros, en su gran mayoría en hoteles céntricos, predios feriales y universidades, y en menor proporción en centros culturales y entidades diversas. El nivel de excelencia en servicios de organización, hotelería y gastronómicos, y una variada agenda de actividades conexas son decisivas para que Buenos Aires esté sobre grandes urbes del continente como Washington, Montreal, Río de Janeiro, o Santiago.
A nivel mundial, antes que Buenos Aires están Viena, en Austria, donde en 2012 se realizaron 195 encuentros; luego París, en Francia; Berlín, Alemania y Madrid y Barcelona, en España. En América la otra ciudad con muchos congresos es Río de Janeiro, con 83 convenciones realizadas el año pasado. Los beneficios que produce la organización de un congreso tanto a nivel nacional como internacional es el gran movimiento que se registra durante su desarrollo en ocupación hotelera, consumo de servicios gastronómicos, excursiones y venta de souvenires.
Hacer extensiva esta actividad de congresos y convenciones a otras capitales del país, caso de San Juan, es una acción a tener en cuenta para promover el turismo interno y hacer conocer nuestros recursos a calificadas personalidades que llegan cada vez que se organiza este tipo de encuentros.