Por María Antonia Sansó Santos
Licenciada en Bioquímica

El Cambio climático se define como la variación global del clima de la tierra. Esto es debido a causas naturales y a la acción del hombre. El clima de la Tierra ha variado a lo largo de su historia, sucediéndose ciclos glaciares e interglaciares que han tenido lugar en miles de años. Variaciones naturales por períodos de tiempo más cortos, han ocurrido debido a erupciones volcánicas, variaciones de la energía solar o alteraciones en las corrientes marinas. Pero un cambio tan notable como el que ha tenido lugar a partir de la revolución industrial, ha generado muchas controversias hasta llegar a la conclusión, con más del 95 % de certeza científica, que se debe a acciones del hombre. 


La Tierra puede mantener una atmósfera adecuada para el desarrollo de la vida, mediante un proceso natural llamado "Efecto Invernadero". Ocurre cuando los rayos solares calientan la tierra y son reflejados como rayos infrarrojos, los que son atrapados por ciertos gases de la atmósfera terrestre que los irradian en todas direcciones. Esto provoca que una parte vuelva a la Tierra. De esa forma se incrementa el calor que ella recibe y da como resultado, una temperatura media de unos 15ºC. Sin ese efecto, la Tierra sería una bola helada de unos 18ºC bajo cero. Este mecanismo es muy delicado. Cualquier aumento en la concentración de esos gases, se traduce en incremento de la temperatura media de la Tierra. Y eso es lo que ocurre a partir de la "Revolución Industrial" y más aceleradamente a partir de 1980, produciendo lo que se ha dado en llamar, "Calentamiento global". 


Desde el siglo pasado los gases quemados de combustibles fósiles aumentaron un 30% y en consecuencia la temperatura media de la tierra asciende cada año. Los océanos se calientan y acidifican, los glaciares se funden, aumenta el nivel del mar, las evaporaciones de las aguas favorecen la formación de tormentas, se afectan las corrientes de aire con generación de huracanes, se producen inundaciones, olas de calor, sequías etc. Por tal motivo, urge incorporar energías renovables y cambiar el combustible por energía eléctrica. Como el CO2 es acumulativo y puede durar en la atmósfera hasta 100 años o más, hay que trabajar para estabilizar la concentración de gases con efecto invernadero durante este siglo. Intentar que la temperatura de la Tierra no supere los 2ºC de aumento, respecto a la temperatura media preindustrial. Hay que hacer estos esfuerzos para que el aumento se mantenga por debajo de 1º C y medio, hasta finales de siglo, tal como lo establece el Acuerdo de París, adoptado en 2015 por 196 países y que entrará en vigencia en 2021. Frente a las evidencias científicas, los cambios deben ser "urgentes y sin precedentes". La brecha entre lo que la Ciencia dice y lo que imponen los poderosos intereses económicos del mercado del Carbono, produjeron la retirada o la no ratificación de países muy contaminantes. Pero el sostenido aumento de desastres climáticos, requiere acciones más drásticas. Actualmente, junto a la comunidad internacional, Argentina suma esfuerzos para adecuarse al cambio climático y mitigar sus efectos.