Es posible pensar el cine como recurso didáctico en distintos niveles de educación.


La pregunta sobre la enseñanza y el aprendizaje, es una constante entre docentes e investigadores. ¿Cómo hacer, cómo facilitar ese proceso de apropiación de lo nuevo, ello es una preocupación cotidiana ante los vertiginosos cambios que han producido en la escena de la educación. Sin duda, el libro ha sido por siglos el instrumento, el vehículo privilegiado, del proceso educativo. Hoy, sin embargo la educación estalla de diversas maneras y sale de los recintos clásicos para llevarse a cabo en cualquier momento y lugar, pero significante y cada vez más alrededor de las pantallas. Además del cine y la televisión que acompañaron gran parte del siglo XX, hoy se suman las nuevas tecnologías de la información y comunicación, la informática, el desarrollo del mundo virtual que multiplican las pantallas. La información está ahí, disponible en volúmenes extraordinario. Puede accederse por medio del cine, la televisión y de la informática a mundos absolutamente lejanos en tiempo y espacio. Es cierto también que esos mundos no son siempre apropiados. Interactuar con las pantallas, no implica aprender, menos aún "aprender mejor'' Acceder a un mayor volumen de información, no garantiza comprensión y apropiación de saberes. Es necesario formar habilidades y competencias. Tema incluido dentro del Plan Provincial de Capacitación y Actualización Docente. San Juan tendrá el mérito de que nos visite el pedagogo, investigador y especialista en didáctica de México, Dr Ángel Díaz Bárriga, quien en uno de sus libros "Curriculum en Educación'' se refiere a crear ambientes de aprendizaje. "El cambio -expresa-, no puede venir de las instituciones, sino de los docentes, quienes deben vincular los saberes con la realidad. El eje de su pensamiento es cómo lograr articular y buscar un encuentro entre lo curricular y lo didáctico. El desafío es cómo lograr una mayor integración''.


Aprender es un proceso complejo que supone la construcción de conceptos y categorías para entender el funcionamiento del mundo y de la sociedad. En medio de esta encrucijada, el lenguaje audiovisual como por ejemplo el cine, se presenta como universal, accesible, lúdico, afectivo sensorial...se ve y se oye con todo el cuerpo. Sus elementos, encadenados muchas veces rompiendo la lógica narrativa clásica, propician un tipo de acercamiento marcado por la racionalidad de lo emotivo.


La propuesta en este sentido tiene al cine, a las películas, como protagonistas. Ha sido pensado como recurso y objeto de estudio que permite elaborar los diversos recorridos didácticos. Pero para ello es necesario identificar, jerarquizar, descubrir y analizar los filmes como discusión. Se vuelve indispensable alfabetizar, alfabetizarse en la lectura del lenguaje visual para poder abordar sus construcciones desde una percepción crítica. Hace falta entrenar nuestra mirada para ayudar a "ver''. En el aula por ejemplo, en Ciencias Sociales es posible pensar el cine como recurso didáctico, pero también, es posible pensarlo como una llave hacia lugares quizás desconocidos, por ejemplo un "documento de época''. Un filme provee información no sólo por lo que cuenta, sino que también permite vislumbrar el clima de ideas, los conflictos propios del momento histórico.

Por Yolanda Quiroga
Especialista en Educación.