El Día del Escritor en Argentina se celebra el 13 de junio en homenaje al natalicio de Leopoldo Lugones (1874-1938), quien fundó la Sociedad Argentina de Escritores, y dirigió la Biblioteca Nacional de Maestros, que en la actualidad conserva la biblioteca particular de este destacado escritor. La obra de Lugones fue abundante y multifacética, además de escritor fue periodista, historiador, docente, traductor, filólogo, teósofo, diplomático y político.


Con sus cuentos se transformó en uno de los precursores de la literatura fantástica y de ciencia ficción en nuestro país. 


Se dice que escribir es un arte, y el escritor a través de este oficio puede expresar sus vivencias convirtiéndolas en una creación literaria. Son muchas las horas a las que dedica su tiempo, que no es tal cuando se inspira y da vida a personajes, relatos, sentimientos, un universo que lo convierte en un verdadero creador de una ficción, de una dimensión que refleja en parte a la realidad. 


En nuestro país la literatura cobra vida en la etapa del Romanticismo donde Echeverría, Mármol, Sarmiento, canalizan sus ideologías a través de escritos, que trascienden inclusive fuera de nuestro país. Se trata de una literatura comprometida, donde el escritor da a conocer su pensamiento político en sus escritos. 


Domingo F. Sarmiento en sus obras como "Recuerdos de Provincia'' vivifica esos recuerdos de su niñez, los que pasó en su casa materna, como así también describe sitios y las familias destacadas de aquella época pasada. En "Facundo, Civilización y Barbarie'', quizás la obra más conocida, comienza con la descripción física de nuestro país, además de reflexionar en este ensayo sobre una dicotomía todavía vigente, Buenos Aires, la gran ciudad donde se concentra el poder económico, símbolo de la civilización, opuesta al interior, un tanto olvidado pero donde irónicamente sus hombres y mujeres fueron protagonistas de grandes acontecimientos históricos como el Éxodo Jujeño, la Declaración de la Independencia, la Campaña Libertadora del Gral. José de San Martín.


Otro escritor cuya identidad ha sido reconocida en otras latitudes debido a sus obras es Jorge Luis Borges, gran lector, pues valoraba este hecho más que dedicarse a escribir. Un estudioso y conocedor de la filosofía, de tradiciones de América, del Oriente lejano, cultivó la prosa, y también la lírica con una simbología que individualiza su obra.


Por su parte Julio Cortázar con su novela "Rayuela'' cuya edición fue presentada en el pasado Congreso Internacional de la lengua española por Mario Vargas Llosa, que tuvo la oportunidad de conocerlo y compartir conversaciones sobre sus publicaciones.


Ernesto Sábato, físico químico, dejó sus investigaciones para dedicarse a la literatura, con el título "El Túnel'' trascendió en nuestro país y como escritor también es reconocido en otros países trascendiendo fronteras.


Muchos escritores podrán sumarse como actores en el ejercicio de la escritura. Muchos anónimos, poco conocidos se ejercitan a diario por el disfrute de contar una historia, de matizar una realidad, que evoca la verdadera realidad. Una misión que se asume sin ser impuesta, el arte de escribir implica mimetizar, acercarse a lo real, sin llegar a serlo. 

Por la Dra. Gladys Aballay Meglioli
Filología Hispánica.