Hoy en día la actividad de los operadores turísticos se ha incrementado notablemente con el ofrecimiento de productos antes insospechados. La lista de destinos puede ser tan larga como la imaginación de la mente humana pueda llegar. Pero estas nuevas formas de turismo, con un consumidor concientizado y preocupado por las condiciones medioambientales y con el deseo de que futuras generaciones disfruten de nuestro planeta, ha provocado que poco a poco se vaya tomando conciencia acerca de la importancia de preservar el entorno natural y cultural.

Este llamado turismo sostenible no es otra cosa que un turismo responsable. 
En concordancia con ello las Naciones Unidas declaró a 2017 "Año Internacional del Turismo Sostenible para el desarrollo". La Organización Mundial del Turismo establece 5 grandes tendencias para las próximas décadas, de las que emergerán nuevos productos para los viajeros: el turismo aventura, en donde las preferencias será viajar hacia las altas montañas, a las profundidades de las zonas submarinas o a los confines de la tierra. El turismo de cruceros, en pleno auge.

El Ecoturismo, es decir el turismo de bajo impacto en áreas naturales. El Turismo cultural, siendo Europa y el Sudeste asiático los principales destinos y el Turismo Temático, es decir aquel donde los intereses especiales hacen ignorar las motivaciones vacacionales tradicionales, como es la estación del año en que se viaja.

Existen diversos factores que han influido en el desarrollo de este turismo temático, entre ellos la necesidad de buscar nuevos elementos que atrapen flujos turísticos en regiones o zonas menos favorecidas por el turismo; la búsqueda de atractivos distintos por parte de una demanda cada vez más exigente y dar valor agregado a un destino para hacerlo más competitivo en relación a otro similar.

Los viajeros del siglo 21 serán pobres en tiempo, por lo que buscarán productos que ofrezcan un máximo de emociones en un corto tiempo. Esta tendencia favorecerá el auge de los parques temáticos, los cuales presentan distintas clasificaciones. Según el tema tenemos los históricos como en Tailandia o en España; los de carácter religioso, como Tierra Santa en nuestro país; aquellos basados en personajes de ficción como el célebre Asterix, en París. Los que se basan en un recurso natural como el agua, por ej. el Monasterio de Piedra en España, o los que ofrecen tours ecológicos, arqueológicos, antropológicos, combinados con una fuerte dosis de aventura.

En nuestra provincia, el parque temático referido a interpretar, conocer, vivir y sentir, como era una etapa de la vida en la tierra hace 180 millones de años, es el Parque Natural Ischigualasto, declarado Patrimonio de la Humanidad. Se hallan en carpeta otros proyectos muy importantes como el Parque Aventura en la zona de perilago del Dique Cuesta del Viento, en Iglesia, y el proyecto en ejecución del Primer Parque Termal de San Juan, en Pismanta.

Y si de servicios se trata, no podemos dejar de mencionar el primer Apart hotel temático "Olivos del Sol", orientado a concientizar al visitante en la producción y cultivo de la aceituna.
Ojalá que no dejemos pasar esta oportunidad, que la declaración de las Naciones Unidas no quede en solo anuncios y encaremos con seriedad el camino hacia el concepto de que los viajes responsables pueden contribuir al desarrollo sostenible.
 
(*) Técnica universitaria en Turismo.