Sabemos que las palabras reflejan nuestra realidad, ya sea política, económica, social, y llegan a "ponerse de moda'' por algún tiempo cobrando relevancia, y en muchos casos dejan de utilizarse o disminuyen su empleo cayendo inclusive en desuso.
Entre los términos que cobran importancia debido al empleo que los hablantes hacen sobre el léxico de nuestro idioma podemos señalar que tras elegir escrache en 2013, selfi en 2014 y refugiado en 2015, el equipo de la Fundación Fundéu (Fundación del Español Urgente) de España ha optado en esta ocasión por populismo en 2016, como palabra del año elegida entre aquellos términos que han marcado la actualidad informativa y tienen, además, interés desde el punto de vista lingüístico.

Se trata de un término originalmente neutro, pero que se ha ido cargando de connotaciones hasta convertirse en un arma en el debate político. La Real Academia de la Lengua la define como: "Tendencia política que pretende atraerse a las clases populares''.
"Parecía claro que en un año tan político como éste, con acontecimientos de importancia global como el Brexit, la victoria electoral de Donald Trump y los diferentes procesos electorales y plebiscitarios en América y España, la palabra del año de Fundéu tenía que venir de ese ámbito'', explica el coordinador general de la Fundación, Javier Lascuráin.

Antes de dar a conocer la decisión final, la Fundación publicó una lista de doce palabras finalistas en la que, además de las palabras del ámbito de la política, figuraban términos como youtubero, la adaptación propuesta del anglicismo youtuber, y ningufonear, una alternativa al inglés phubbing, que se usa para definir la actitud de quien solo presta atención a su dispositivo móvil mientras desatiende a quien tiene delante.

El populismo con una "significación peyorativa'' es el uso de "medidas de gobierno populares, destinadas a ganar la simpatía de la población, particularmente si esta posee derecho a voto, aún a costa de tomar medidas contrarias al Estado democrático. Sin embargo, a pesar de las características anti institucionales que pueda tener, su objetivo primordial no es transformar profundamente las estructuras y relaciones sociales, económicas y políticas, sino preservar el poder y la hegemonía política a través de la popularidad entre las masas.

El término "populismo'' sirve para referirse a movilizaciones, movimientos, ideologías, actitudes discursivas, regímenes y formas de gobierno, dictaduras, políticas, programas de gobierno, reformismos. Actualmente en general se utiliza el término como sinónimo de un "Estado interventor y asistencialista que controla los servicios públicos, es dueño de empresas, alienta el proceso de industrialización a través de regulaciones, subsidios y protección aduanera, y usa el gasto público con fines políticos''.

Pone énfasis en la cuestión del liderazgo "demagógico'', las relaciones clientelistas y la "manipulación de las masas''.
Para este año 2017 tendremos que esperar para conocer las tendencias lingüísticas, que reflejarán la realidad política, social, religiosa o cultural, con la que se intentará resumir la visión imperante de un mundo tan convulsionado como el nuestro. 

(*) Filología Hispánica.