Unos 480 millones de personas habla el español en el mundo

Por Dra. Gladys Aballay Meglioli.
Filología Hispánica

La lengua que hablamos permite la incorporación de vocablos, voces nuevas, que permanecen y otras caen en desuso. Hoy, 23 de abril, se celebra el "Día del idioma español'' y es "el idioma más hablado en el mundo después del chino. Es la lengua materna para aproximadamente 480 millones de personas en el mundo''. Por otra parte es el "Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor'' (Resolución 28- C/18 de la UNESCO). Y desde luego, se abre un espacio de reflexión sobre el uso que hacemos de nuestra lengua. Los escritores hacen posible y contribuyen en gran medida a su difusión. En el día en que se lee la obra de la literatura universal "El Quijote de la Mancha'', de Miguel de Cervantes Saavedra, destacamos la gran cantidad de registros que tiene, como refranes y locuciones de la época. En la actualidad podemos conocer estos usos idiomáticos por medio de la palabra escrita.


Así como en una década se impuso una moda en la vestimenta, un estilo de música, de igual forma aparecieron palabras que pasado un tiempo se desvanecen. Nuestro idioma es uno de los más ricos en cuanto a opciones a la hora de elegir un término determinado para expresar lo que realmente deseamos. 


Hablemos de un ejemplo: en este año 2019, se celebra el "Año del Cerdo'', según indica una tradición en China. Así encontramos muchas denominaciones teniendo en cuenta las distintas regiones donde se habla el español. El hablante enriquece a la lengua con diferentes matices. Ahora bien, contamos con gran diversidad de palabras asociadas al cerdo, teniendo en cuenta las variantes idiomáticas de cada región. Así nosotros decimos "chancho'', que es un término español antiguo y un vocablo que se emplea en el Sur de la región de Aragón para designar al puerco. Pero como hablantes también lo aplicamos a una persona descuidada en su aseo. Inclusive lo extendemos a las personas cuando decimos "me hizo una chanchada'', al referirnos a una mala jugada que nos han hecho. También conocida es la expresión 'marca chancho'' aludiendo al poco valor de algún objeto.


En el sur de España se habla de 'guarro'' y marca una variante léxica, que no es la misma que en el Norte de la Península Ibérica donde se emplea "gorrino'', "cuto'', "lechón'' y 'puerco''. En el caso particular de América latina, más precisamente en Colombia, se habla del "marrano'', "cochino'', entre otros. Sin embargo, al referirnos a su cría, "el cochinillo que está mamando'', se habla de lechón, entre otros, aplicable en España y en América. En cuanto al lugar de venta del cerdo hablamos de venta de embutidos o chacinados, pero en nuestra provincia se denominaba en la época colonial 'chanchería''. Mucho más se puede decir sobre nuestro idioma. Nos quedamos con este ejemplo para conocer los alcances que presenta en la comunidad hispano hablante. De momento, nos quedamos con una realidad, el idioma español es uno de los más hablados en el mundo, y sabemos que por medio de la lengua es posible difundir y consolidar una cultura, tradiciones, que nos permiten identificarnos, reconocernos, en definitiva comunicarnos.