El actual contexto nos indica que ya no resulta suficiente una educación centrada en la atención de las necesidades básicas de aprendizaje "mediante el desarrollo de las denominadas competencias esenciales” y el abordaje de un conjunto de saberes básicos. Para que los seres humanos puedan sobrevivir en sociedades cada vez más multiculturales y competitivas. Para ello hace falta ampliar y enriquecer este piso formativo, desde una mirada cívica y liberadora, que posibilite a las personas a desarrollar plenamente sus capacidades intelectuales, prácticas y sociales. Por ejemplo vivir, trabajar y participar plenamente, mejora la calidad de vida. Es decir, continuar aprendiendo durante toda la vida. Se piensa en una educación que promueva el ejercicio de la ciudadanía, una verdadera transformación social. En este marco, tanto en el nivel individual como en el de la comunidad, debemos interrogarnos acerca de qué aprendizajes necesitamos hoy, aquí, y ahora, para posibilitar a las personas, y comunidades, la construcción de determinadas habilidades que les permitan salir de la pobreza y marginación. Desde esta visión, la Unesco en 1993 estimó la conveniencia de construir para este siglo 21 una educación basada en tópicos fundamentales: "aprender a conocer” (para adquirir una cultura amplia y conocimientos específicos que estimulen la curiosidad para seguir aprendiendo durante toda la vida y desarrollarse en la sociedad del conocimiento) "aprender a hacer” (desarrollar competencias más allá de las profesiones u oficios, que capaciten a las personas a trabajar en equipo, y desenvolverse en diferentes contextos) "aprender a ser” (para conocerse y valorarse a sí mismo) "aprender a vivir juntos” (desarrollando la comprensión y valoración del otro, la comprensión mutua y la paz en sociedades cada vez más multiculturales y competitivas). Es preciso añadir a estos pilares de la Unesco un nuevo enfoque que es "aprender a emprender”, que desde el hacer, con saber, posibilite a los alumnos a fijarse metas, hacer propuestas y tomar iniciativas enfrentando las dificultades desde sus fortalezas, con inteligencia, innovación y creatividad, superando, así, las amenazas en este escenario.
Dada la rapidez con que se operan los cambios sociales, culturales, políticos, económicos y tecnológicos, dichos aprendizajes constituyen una oportunidad para reflexionar acerca de la idea de "hacer” de "enseñar a emprender”, esto no es nuevo, desde hace décadas se aplica en distintos países, también en la Argentina, como una verdadera estrategia con la idea de hacer, obrar, operar, preparar, realizar y ejecutar una o varias actividades según un plan, programa o proyecto específico. Esto permite afirmar que la idea de emprender trae consigo distintos enfoques, como incorporación al currículo escolar de: estrategias para potenciar conocimientos, habilidades y actitudes que ayuden a los alumnos a desarrollar sus propios trabajos. Es una forma de mejorar la perspectiva de integración profesional de los alumnos al mundo laboral. El emprender desde la escuela tiene como objetivo influir en los enfoques y comportamientos de los alumnos, de tal forma que muestren una mayor capacidad para resolver problemas con iniciativa y credibilidad.
El abordaje de la competencia emprendedora no supone la inclusión de una nueva área, asignatura o espacio al currículo existente. Es un principio transversal, es decir interdisciplinario con las distintas áreas del saber, preparándolos hacia la iniciativa de los cambios, el desarrollo del pensamiento creativo, el espíritu crítico y el aprender a trabajar en y con la incertidumbre. El éxito dependerá particularmente, de lo que los alumnos "aprendan haciendo”.
Ello supone revisar hacia el 2015 el currículo e incluir los contenidos y estrategias para abordar dicha competencia desde nivel inicial hasta el superior. Desde el punto de vista didáctico pedagógico, exige un aprendizaje centrado en la práctica social a través de proyectos a partir de intereses y necesidades de los alumnos.
La educación podrá contribuir desde el respeto a las diferencias a que las transformaciones sean de calidad, junto a las organizaciones de la comunidad.
(*) Especialista en Educación, escritora y productora del programa "Botica Educativa” Radio Sarmiento.