Las preocupaciones de los padres para con sus hijos van en aumento. La violencia, las drogas y la dependencia adictiva a los medios electrónicos, como Internet, son los principales problemas que afectan a la juventud. De ellos hay una serie de derivaciones que ensombrecen aún más el panorama, tal es el caso del "sexting”, una práctica de exhibicionismo on line a través de las, cada vez más utilizadas redes sociales de Internet.

La palabra "sexting”, conjunción de los vocablos ingleses "sex” y "testing” que significan sexo y envío de texto, respectivamente, a través de Ia web, mediante el empleo de teléfonos celulares, es una práctica que cada vez tiene más adeptos en nuestro país. Y ésto está basado en que de los casi 10 millones de usuarios de redes sociales y blogs, la mitad son adolescentes de entre 12 y 18 años, de los cuales el 90% posee un teléfono celular o tiene acceso a uno de ellos. Pero lo que más inquieta es que el 36% de esos chicos y chicas reconoció haber subido a la web o enviado por teléfono fotos propias en poses provocativas.

Expertos en el comportamiento de adolescentes y jóvenes, sostienen que para evitar que este fenómeno continúe propagándose es necesario que los padres se interesen más en los hábitos de sus hijos y que reduzcan la brecha generacional que plantean las nuevas tecnologías. Esta es la única forma de ejercer un efectivo control de lo que los hijos hacen en Internet y desalentar prácticas como la del "sexting”.

La indiferencia o el desconocimiento de las nuevas tecnologías en materia de comunicación, como también la prohibición de su uso son el peor camino que un padre puede elegir si pretende evitar estas desviaciones.